Reconciliación entre la gente

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De wikishia

La reconciliación entre la gente (en árabe: إصلاح ذات البين), es una de las virtudes morales que hace referencia al acto de mediación para mejorar la relación entre los seres humanos. En su lado contrario, crear enemistad entre las personas se considera un pecado y uno de los vicios morales.

En los versículos y narraciones se han propuesto diferentes soluciones para poner fin a conflictos y disputas y reconciliar a las personas; entre ellas, la selección de un árbitro por las partes en las disputas familiares, escribir un testamento correcto con el fin de evitar las peleas posteriores sobre la herencia, y prestar atención a los consejos islámicos. En las enseñanzas religiosas, poseer cualidades como la tacañería, seguir las tentaciones satánicas, y la mundanalidad se han introducido como factores que crean enemistad entre las personas.

Significado

En árabe, la expresión “Islah Zat al-Bain” (إصلاح ذات البين) significa reconciliar a las personas y mejorar la relación entre los individuos o grupos[1] y solucionar sus disputas ocurridas debido al conflicto y la enemistad, etc.[2] Esta palabra está adoptada del primer versículo de la Sura al-Anfal,[3] donde dice:

Sed temerosos de Dios y arreglad vuestras relaciones mutuas y obedeced a Dios y a Su Mensajero si sois creyentes.” (Corán, 8: 1)

Reconciliar a las personas es una de las virtudes morales, que está en contra de la calumnia y crear enemistad entre las personas.[4]

Importancia y posición

En varios versículos, el Corán ha hecho referencia a la reconciliación entre la gente como un deber de los creyentes.[5] Además, el Imam Ali (P) instruyó en su testamento, al Imam Hasan (P) y al Imam Husain (P) que reconciliasen a la gente y que arreglasen sus relaciones:

A ustedes, mis otros hijos, mis parientes y todos los que siguen este deseo mío, le aconsejo que teman a Dios, sean piadosos, de buena fe y honestos con los de más y desarrollen mutuas relaciones de amistad, porque he escuchado a vuestro abuelo el Santo Profeta (PBD) decir que: “Reconciliar a las personas es mejor que rezar y ayunar durante un año”.[6]

Según los versículos del Corán, aquellos que buscan la reforma entre la gente, disfrutan de la misericordia y el perdón de Dios.[7] En algunos hadices, reconciliar a las personas es considerado superior a la oración, el ayuno[8] y la caridad.[9] Además, según una narración, la persona que trata de hacer las paces entre dos personas es bendecida con las bendiciones de los ángeles, y tendrá la recompensa de la vigilia durante la Noche del Qadr.[10]

El Corán ha considerado que los conciliábulos secretos están permitidos para reconciliar a las personas, aunque se ha introducido en otros lugares como un acto malvado:[11]

  • “Nada bueno sale, por lo general, de los conciliábulos secretos, salvo aquellos convocados para promover la caridad, la conducta honorable, o la reconciliación entre la gente: y a quien así actúe buscando la complacencia de Dios, le daremos en su momento una magnífica recompensa.”[12]
  • “Y no expongáis a Dios como sujeto de vuestros juramentos, (jurando por Él) para no hacer el bien, para no actuar con piedad y para no reconciliar a la gente. Y Dios es Quien todo lo oye y todo lo sabe.”[13]

Se ha narrado que Mufazzal Ibn Umar recibió sumas de dinero del Imam Sadiq (P) y las usaba para reconciliar a los shiítas. Por ejemplo, utilizó este dinero para resolver la disputa entre un hombre llamado Sabiq al-Hayy y su yerno.[14]

Métodos y obstáculos

Para reconciliar a la gente, se han recomendado varios métodos y soluciones, entre ellos:

  • Prevenir las disputas: Según los exégetas, el tema del versículo 182 de Sura al-Baqara[15] es la prevención de disputas entre los herederos, por la que se instruye al testador que observe la justicia en su testamento para evitar motivos que provoquen disputas.[16]
  • Las disputas familiares se solucionan por dos árbitros: Según el Corán, para resolver las disputas familiares cuando el marido y la mujer temen la separación, se sugiere que cada uno de los conyugues elija un árbitro para crear la reconciliación.[17]
  • Encontrar la raíz y los orígenes de la disputa,
  • Utilizar los factores emocionales,
  • Tener paciencia
  • Ser neutro y juzgar correctamente.[18]

La calumnia es uno de los obstáculos en el camino de la reconciliación a la gente, y la solución para enfrentarlo es no confiar en los chismes y rumores.[19] Otros obstáculos en este camino son los siguientes:

En las comunidades musulmanas, resolver las disputas entre las personas es deber del gobierno y de los creyentes.[23] Además, de acuerdo con el versículo 9 de la Sura al-Huyurat, cuando hay un conflicto entre dos grupos de creyentes, primero deben reconciliarse mediante el consejo y la invitación al Corán y el decreto de Dios, pero si un grupo no acepta la oferta de reconciliación, entonces deben luchar contra el grupo rebelde:[24]

“Si dos grupos de creyentes luchan entre sí, reconciliadles; pero si luego uno de los dos (grupos) insiste en actuar injustamente con el otro, combatid a aquel que actúa injustamente hasta que vuelva al mandamiento de Dios; y si vuelven, reconciliadles con justicia, y sed equitativos (con ellos): pues realmente, Dios ama a los que obran con equidad.”[25]

Leyes relacionadas

Los sabios musulmanes han emitido varias fatwas bajo el título de la reconciliación entre la gente:

  • La reconciliación entre dos o más personas que se tienen odio y enemistad es un acto recomendable. Este acto puede ser obligatorio en los casos en que la vida de un creyente esté en peligro debido a la disputa.[26]
  • Según el ayatolá Makarem Shirazi, reconciliar a dos grupos de musulmanes que son hostiles entre sí es un acto obligatorio del tipo Wayib Kifai’i, es decir, es un acto obligatorio que si algunos musulmanes lo realizan en forma suficiente y completa, las demás personas no necesitarán realizarlo.[27]
  • Está permitido gastar el Zakat para reconciliar a la gente.[28]
  • Es recomendable que el juez llame a las dos partes a la paz antes de emitir el veredicto. Pero si las partes se niegan a reconciliarse, debe emitir el veredicto.[29]
  • Para la reconciliación entre las parejas, es obligatorio que la mujer elija un árbitro y el hombre elija un árbitro. Sin embargo, algunos lo han considerado recomendable.[30]

Referencias

  1. Tabatabai, Al-Mizan, 1390, vol.9, p.6.
  2. Ver Tabarsi, Mayma’ al Bayan, 1372, vol.4, p.798.
  3. Dehjoda, Diccionario, bajo la palabra “Islah Zat al-Bain”.
  4. Makarem Shirazi, Ética en el Corán, 1377, vol.3, p.314.
  5. Por ejemplo, ver: Sura Al-Huyrat, versículo 10.
  6. Nahy al-Balaqa, comentado por Sobhi Saleh, Carta 47.
  7. Sura Nisa, versículo 129.
  8. Saduq, Sawab al-Amal, 1406 H, página 148.
  9. Hurr Ameli, Was’il al-Shia, 1409 H, volumen 18, página 441.
  10. Deilami, A’lam al-Din, 1408 H, página 419.
  11. Sura Muyadalah, versículo 10; Makarem Shirazi, Tafsir Nemune, 1371, vol.4, p.127.
  12. Sura Nisa, versículo 114.
  13. Sura Baqara, versículo 224.
  14. Kulaini, Al-Kafi, 147 H, vol.2, p.209, h4.
  15. Tabarsi, Mayma’ al Bayan, 1371, vol.1, p.485.
  16. Fajr Razi, Al-Tafsir al-Kabir, 1420 H, vol.5, págs. 236-239.
  17. Tusi, Al-Tibian, volumen 3, página 192; Tabarsi, Mayma’ al Bayan, 1371, vol.3, p.70.
  18. Makarem Shirazi, Ética en el Corán, 1377, vol.3, págs. 317-318.
  19. Al-lame Maylisi, Bihar al-Anwar, volumen 75, página 268.
  20. Muqniyeh, Al-Kashif, 1424 H, vol.1, p.311.
  21. Hashemi Rafsanyani, Tafsir Rahnama, 1386 S, vol.6, p.302.
  22. Makarem Shirazi, Tafsir Nemune, 1371, vol.4, p.151.
  23. Makarem Shirazi, Tafsir Nemune, 1371, vol.22, p.170.
  24. Tabari, Yame’ al-Bayan, 1412 H, vol.26, p.81-80; Faiz Kashani, Tafsir al-Safi, 1415 H, vol.5, p.50.
  25. Ver: Corán, 49: 9.
  26. Kashif al-Qita, Wayiza al-Ahkam, 1366 H, vol.2, p.16.
  27. Makarem Shirazi, Tafsir Nemune, 1374, vol.22, p.170.
  28. Nayafi, Yawahir al Kalam, 1404 H, volumen 15, páginas 361-362.
  29. Nayafi, Yawahir al Kalam, 1404 H, volumen 40, página 145.
  30. Nayafi, Yawahir al Kalam, 1404 H, vol.31, p.213.

Bibliografía

  • Dehjoda, Ali Akbar, Diccionario, Teherán, Universidad de Teherán, 1377 S.
  • Deilami, Hasan Ibn Muhammad, A’lam Al-Din, Qom, Fundación Alul-Bayt, 1408 H.
  • Faiz Kashani, Mohammad, Tafsir Al-Safi, Teherán, Escuela Al-Sadr, 1415 H.
  • Fajr Razi, Muhammad Ibn Omar, al-Tafsir al-Kabir, Beirut, Dar Ihya al-Turaz al-Arabi, 1420 H.
  • Hashemi Rafsanyani, Akbar, Tafsir Rahnama, Qom, Bostan Kitab, 1386 S.
  • Hurr Ameli, Muhammad Ibn Hassan, Was’il al-Shia, Qom, Fundación Alul-Bayt, 1409 H.
  • Kashif Al-Qata, Mohammad Husain, Wayizah Al-Ahkam, Nayaf, Instituto Kashif Al-Qata, 1366 H.
  • Kulaini, Muhammad Ibn Yaqub, Al-Kafi, Teherán, Dar al-Kitab al-Islamiya, 1407 H.
  • Makarem Shirazi, Naser, Ética en el Corán, Qom, Escuela Imam Ali ibn Abi Talib (P), 1377 S.
  • Makarem Shirazi, Naser, Tafsir Nemune, Teherán, Dar al-Kutb al-Alamiya, 1371 S.
  • Maylisi, Mohammad Baqir, Bihar al-Anwar, Beirut, Dar Ihya al-Turaz al-Arabi, 1403 H.
  • Muqniyeh, Mohammad Yawad, Tafsir al-Kashif, Teherán, Dar al-Kitab al-Islamiya, 1424 H.
  • Nahy al-Balaqa, corregido por Sobhi Saleh, Qom, Hiyrat, 1413 H.
  • Nayafi, Mohammad Hasan, Yawahir al-Kalam fi Sharh Shariah al-Islam, Beirut, Dar Ihya al-Turaz al-Arabi, 1404 H.
  • Saduq, Muhammad Ibn Ali, Sawab al-Amal wa Iaqab al-Amal, Qom, Dar al-Sharif al-Radi, 1406 H.
  • Tabari, Muhammad Ibn Yarir, Yame’ al-Bayan fi Tafsir al-Qur'an, Beirut, Dar al-Marafa, 1412 H.
  • Tabarsi, Fazl Ibn Hassan, Mayma’ al Bayan, Teherán, Naser Josro, 1372.
  • Tabatabaei, Sayyed Mohammad Husain, Al-Mizan fi Tafsir al-Qur'an, Beirut, Dar Ihya al-Turaz al-Arabi, 1390 H.
  • Tusi, Muhammad Ibn Hassan, al-Tibian fi Tafsir al-Qur'an, revisado por Ahmad Habib Ameli, Beirut, Dar Ihya al-Turaz al-Arabi.