Cumplimiento de las promesas
El cumplimiento de las promesas es una de las virtudes morales recomendadas en el Corán y los hadices. Según los hadices, el cumplimiento de las promesas es uno de los pilares de la religión, un signo de la fe y un punto común entre todas las religiones. El Sagrado Corán alaba a Dios con esta característica y los hadices introducen el cumplimiento de las promesas como una de las características de los Imames Infalibles (P).
Dios ha elogiado en el Corán a aquellos que cumplen sus promesas y los ha introducido entre los creyentes, los veraces, los que rezan, los triunfadores y la gente del Paraíso. Según los versículos del Corán, una de las condiciones para estar con el Profeta (PBD) en el Día de la Resurrección es la fidelidad a los pactos y promesas.
Importancia
La fidelidad a los pactos y promesas significa que cumplir con los deberes y tareas que la persona se ha comprometido a realizar.[1] El cumplimiento de las promesas se considera una de las virtudes morales más importantes, y por otro lado, romper los pactos se considera uno de los peores vicios morales.[2]
Según Makarem Shirazi, este tema ha sido ampliamente discutido en los versículos del Corán y las narraciones, y con las expresiones más fuertes, se ha enfatizado en la necesidad de cumplir los pactos y se ha condenado enérgicamente a quienes violan y rompen sus pactos y promesas.[3]
En las narraciones, el cumplimiento de las promesas se ha considerado la base de la religión y un signo de fe en Dios[4] y en el Día del Juicio[5]. Por otro lado, romper un pacto se considera igual a la falta de fe en Dios.[6] Según un hadiz del Imam Sayyad (P), el cumplimiento de los pactos y promesas es una de los tres principios comunes entre todas las religiones.[7] El libro de Nahy al-Balaqa se refiere a este hecho como una de las obligaciones divinas más importantes.[8] - En el libro de Wasa’il al-Shi’a se han mencionado varias tradiciones con respecto al cumplimiento de las promesas. Por ejemplo, un hadiz narrado por el Imam Sadiq (P):
- “Quien no sea injusto en su comportamiento con las personas, y no les mienta al hablar, y no las traicione con su promesa, está entre aquellos cuyo Qaibah (chisme) está prohibido, su personalidad es perfecta y su justicia es manifiesta, y la hermandad con él es obligatoria.”[9]
Una característica de Dios, de los profetas y de los Imames (P)
Según algunas aleyas, Dios se ha alabado a Sí mismo en el Corán con el atributo de fidelidad.[10] En el Corán, el Profeta Ismael (P) es mencionado con la descripción de "Sadiq al-Wa’d" (el que es veraz en sus promesas).[11] La fidelidad y el cumplimiento de las promesas es una de las características comunes entre los Imames Infalibles (P), especialmente el Imam Husain (P).[12]
En el Corán
La primera aleya de la Sura al-Ma’ida dice:
- “¡Oh vosotros que creísteis! Respetad los compromisos.”[13]
Los jurisprudentes, refiriéndose a este versículo han dictaminado que todos los contratos deben cumplirse y lo han incluido entre los actos obligatorios en libros de la jurisprudencia islámica[14] La fidelidad y el cumplimiento de las promesas es una de las obligaciones[15] que Dios ha ordenado claramente en varios versículos,[16] entre ellos:
- “¡Oh Hijos de Jacob! Recordad Mi merced con la cual os agracié, y cumplid con el Pacto que tenéis conmigo para que Yo cumpla con vuestro pacto, y sólo a Mí temedme con devoción.”[17]
- “Y no os aproximéis a las propiedades de los huérfanos, excepto de la mejor manera posible, hasta que ellos lleguen a la edad adulta. Sed justos al dar la medida y el peso.» No obligamos a nadie más allá de su capacidad. «Cuando habléis sed verídicos, incluso aunque perjudique a un familiar. Cumplid con el pacto hecho con Dios. Esto es lo que Él ha dispuesto para vosotros. Quizás así os dejéis amonestar.”[18]
Rezai Esfahani, un investigador coránico, también argumenta que el hombre es responsable de sus compromisos y deberá rendir cuentas si incumple su promesa.[19] Al respecto, él se refiere al siguiente versículo:
- “Y no os acerquéis a las propiedades del huérfano excepto para beneficiarle, hasta que llegue a la mayoría de edad. Y cumplid los contratos, pues se os pedirán cuentas por ello.”[20]
Efectos y recompensas de la fidelidad a los pactos y promesas
La fidelidad a los pactos y compromisos tiene una importancia significativa en el Islam y se considera una virtud moral. El Islam enfatiza la importancia de cumplir los pactos y contratos en diferentes contextos, ya sea en relaciones personales, sociales, comerciales o políticas. Según los exégetas del Corán y los eruditos de la ética islámica, la fidelidad a los pactos y promesas tiene muchos efectos y recompensas en este mundo y en el más allá, algunas de las cuales son las siguientes:
- Estar junto con el Profeta (PBD) en el Día de la Resurrección,[21]
- Fortalecimiento de la confianza y la unidad. Cumplir los pactos contribuye a la construcción de la confianza mutua y fortalece las relaciones entre las personas y las comunidades. La confianza es fundamental para el funcionamiento adecuado de la sociedad y para mantener la armonía y la paz entre las personas.
- Estabilidad y equidad en las transacciones comerciales: La fidelidad a los pactos en las transacciones comerciales promueve la justicia y la equidad en el comercio. Cumplir con los acuerdos comerciales garantiza que todas las partes involucradas sean tratadas de manera justa y se evite la explotación.
- Preservación del honor y la reputación: La fidelidad a los pactos es una forma de mantener el honor y la reputación personal. Cumplir los compromisos asumidos muestra la integridad y el respeto por uno mismo y por los demás.
- Entrar al Paraíso,[22]
- Prosperidad y salvación.[23]
Es importante tener en cuenta que el Islam también enfatiza la importancia del arrepentimiento y la rectificación en caso de no cumplir con los pactos. Si alguien ha violado un pacto, se le alienta a buscar el perdón, rectificar la situación y hacer todo lo posible para enmendar sus acciones.
Un principio común entre todas las religiones
Según Makarem Shirazi, el cumplimiento del pacto es una ley universal y un principio común entre todas las religiones e incluye tanto a musulmanes como a no musulmanes.[24] Según él, este hecho se encuentra en la naturaleza de los seres humanos.[25] Él, refiriéndose al versículo 177 de La Sura Al-Baqara, afirma que el concepto de guardar un pacto en el Corán no tiene condiciones e incluye todos los pactos, ya sea con Dios o los pactos entre las personas.[26]
En la carta del Imam 'Ali (P) a Malik Ashtar, se afirma que todos los pueblos del mundo, a pesar de sus diferencias de pensamientos, están de acuerdo en el hecho de la necesidad de cumplir con los pactos; Incluso los politeístas de la Época de Yahiliya, respetaban a sus pactos. Por lo tanto, en esta carta, se le ordena a Malik Ashtar que mantenga sus pactos, incluso con los no-musulmanes.[27]
Referencias
- ↑ Qurashi, Diccionario del Corán, 1412 H, vol.7, p.230; Sayyadi, Diccionario de términos e interpretaciones místicas, 1386, página 788.
- ↑ Makarem Shirazi, Ética en el Corán, 1377, vol.3, p.244.
- ↑ Makarem Shirazi, Ética en el Corán, 1377, vol.3, p.244.
- ↑ Makarem Shirazi, Ética en el Corán, 1377, vol.3, p.257.
- ↑ Kulaini, Kafi, 1407 H, vol.2, p.364.
- ↑ Maylisi, Bihar al-Anwar, 1410 H, vol.81, p.252.
- ↑ Saduq, Jisal, 1362, volumen 1, página 113.
- ↑ Nahy al-Balaga, 1414 H, carta 53.
- ↑ Hurr Ameli, Wasa’il al-Shi’a, tomo 5, p. 393.
- ↑ Thaqafi Tehrani, Tafsir Rawan Yawid, 1398 H Volumen 2, página 626.
- ↑ Ver: Sura Maryam, versículo 54.
- ↑ Por ejemplo, véase Seyyed Ibn Tavus, Yamal al-Usbu’, págs. 32, 422, 490, 512; Ibn shahrashub, al-Manaqib, 1379 H, vol.1, p.2; Tabari, Dalail al-Imamah, página 73.
- ↑ Ver: Sura Ma’idah, versículo 5.
- ↑ Jomeini, Kitab al-Bai’, 1421 H, vol.1, p.185. Instituto de Enciclopedia de Jurisprudencia Islámica 1385, vol.1, p.211.
- ↑ Hashemi Rafsanyani, Farhang Qur’an, 1386, volumen 21, página 316.
- ↑ Hashemi Rafsanyani, Farhang Qur’an, 1386, vol.21, p.304.
- ↑ Ver: Sura Bagara: 40.
- ↑ Ver: Sura An’am: 152.
- ↑ Rezaei Esfahani, Corán y las ciencias humanas, 1391, págs.173, 174.
- ↑ Ver: Sura Isra’: 34.
- ↑ Makarem Shirazi, Ética en el Corán, 1377, vol.3, p.257.
- ↑ Hashemi Rafsanyani, Farhang Qur’an, 1386, vol.6, p.514.
- ↑ Hashemi Rafsanyani, Farhang Qur’an, 1386, volumen 14, página 538.
- ↑ Makarem Shirazi, Ética en el Corán, 1377, vol.3, p.257.
- ↑ Makarem Shirazi, Ética en el Corán, 1377, vol.3, p.244.
- ↑ Makarem Shirazi, Ética en el Corán, 1377, vol.3, p.245.
- ↑ Nahy al-Balaqah, 1414 H, Carta 53, página 442.
Bibliografía
- Sagrado Corán.
- Hashemi Rafsanyani, Akbar, Farhang Qur'an, Qom, Bostan Kitab, 1386 s.
- Ibn Shahrashub, Muhammad Ibn Ali, al-Manaqib, Qom, Fundación Al-Al-lama, 1379 H.
- Hurr Ameli, Muhammad, Wasa’il al-Shia, Qom, 1414 H.
- Jomeini, Seyyed Ruhollah, Kitab al-Bai’, Teherán, Instituto para la Edición y Publicación de las Obras de Emam Jomeini, 1421 H.
- Kulaini, Muhammad Ibn Yaqub, al-Kafi, editado por Ali Akbar Qafari, Teherán, Dar al-Kitab al-Islamiya, 1407 H.
- Makarem Shirazi, Nasser, Ética en el Corán, Qom, Madrasa al-Imam Ali Ibn Abi Talib (la paz sea con él), 1377 s.
- Makarem Shirazi, Nasser, Tafsir Nemune, Teherán, Dar al-Kitab al-Islamiya, 1374 s.
- Maylisi, Mohammad Baqir, Bihar al-Anwar, Beirut, Dar Ihiya al-Turaz al-Arabi, 1410 H.
- Rezaei Esfahani, Mohammad Ali, Corán y las ciencias humanas, Qom, Nasim Hayat, 1391.
- Seyyed Ibn Tavus, Ali Ibn Musa, Yamal al-Usbu’, Qom, Dar al-Razi.
- Sheij Saduq, Muhammad Ibn Ali, Al-Jisal, Qom, 1403 H.
- Tabari, Muhammad Ibn Yarir, Dalail al-Imamah, Qom, Dar al-Zajaer.
- Thaqafi Tehrani, Mohammad, Tafsir Rawan Yawid, Teherán, Publicaciones de Burhan, 1386 s.