Ir al contenido

Batalla de Hamra al-Asad

De wikishia
(Redirigido desde «Hamra al Asad»)

La batalla de Hamra al-Asad fue una expedición militar que tuvo lugar en el tercer año de la Hégira, un día después de la batalla de Uhud, con la participación del Profeta Muhammad (PBD). Al enterarse de que los politeístas de La Meca planeaban atacar Medina nuevamente tras la batalla de Uhud, el Profeta (PBD) ordenó a sus seguidores que persiguieran a los enemigos. Durante esta operación, los musulmanes encendían fuegos cada noche para simular un gran número de tropas islámicas, lo que generó temor entre sus adversarios. Como resultado, las tropas de La Meca se retiraron, y el Profeta (PBD) regresó a Medina después de tres días.
Los exégetas han relacionado esta expedición con la revelación de los versículos 140 y 172 al 174 de la Sura Ale-Imran, así como el versículo 104 de la Sura al-Nisa.

El motivo de la guerra

Según las fuentes históricas, la batalla de Hamra al-Asad tuvo lugar en el tercer año de Hégira [1], un día después de la batalla de Uhud [2]. Esta batalla recibió su nombre debido a que se desarrolló en una región que lleva el mismo nombre, situada a ocho millas (veinte kilómetros) de Medina [3]. Se relata que, tras la derrota de los musulmanes en la Batalla de Uhud, el Profeta (PBD) fue informado de que los politeístas de La Meca estaban planeando un nuevo ataque contra Medina [4]. Además, se narra que el Arcángel Gabriel comunicó al Profeta (PBD) la intención de los politeístas de Quraysh de atacar nuevamente [5].
La participación en esta expedición es considerada una virtud para algunos de los compañeros del Profeta (PBD), especialmente el Imam Ali (P), ya que, según los informes, Gabriel le indicó al Profeta (PBD) que solo aquellos que habían sido heridos en la batalla de Uhud (y no habían huido del campo de batalla) tenían derecho a unirse a esta guerra [6]. En el libro de Ayan al-Shia se menciona que Bilal, por orden del Profeta (PBD), anunció después de la oración de la mañana que aquellos que habían participado en la batalla de Uhud debían prepararse para unirse a esta nueva operación y perseguir al enemigo [7]. Según las fuentes históricas, el movimiento del Profeta (PBD) hacia los politeístas de La Meca tenía como objetivo infundir terror entre ellos y demostrar que los musulmanes aún poseían valor y fuerza [8].

Eventos de la guerra

Según el informe de Waqidi en el libro de al-Maqazi, cuando el Profeta (PBD) ordenó avanzar hacia el área de Hamra al-Asad, los heridos que estaban siendo tratados también manifestaron su disposición para participar en esta operación. [9]. Se dice que cuarenta personas heridas de la tribu de Bani Salama se unieron a esta guerra [10], y por esta razón, el Profeta (PBD) oró por ellos. [11].
De acuerdo con los libros históricos, a pesar de las numerosas heridas que sufrió en la batalla de Uhud, el Profeta (PBD) se unió personalmente a los musulmanes para participar en la guerra. [12]. Qutbuddin Rawandi menciona que el Profeta (PBD) confió la bandera del ejército al Imam Alí (PBD) y lo envió al frente del ejército hasta que llegaron a Hamra al-Asad. [13]. Sayyed Ibn Tawus relata: Cuando el Imam Alí (P) regresó de la batalla de Uhud, tenía ochenta heridas profundas en su cuerpo. Al ver su estado, el Profeta (PBD) lloró y exclamó:

"A quien soporte tantos sufrimientos en el camino de Dios, Dios le otorgará recompensas infinitas."

El Imam Alí (P) también lloró y dijo:

"Doy gracias a Dios porque no te di la espalda ni huí del campo de batalla, pero estoy triste porque no pude alcanzar la felicidad del martirio."

El Profeta (PBD) le respondió:

"Si Dios quiere, alcanzarás el martirio en el futuro. Abu Sufyan nos ha amenazado nuevamente y ha convocado otro enfrentamiento en Hamra al-Asad."

El Imam (P) le contestó:

"¡Que mi madre sea sacrificada por ti, oh Mensajero de Dios! No dejaré de servirte. Me apresuro a luchar contra ellos, aunque (por debilidad corporal) tuvieran que llevarme sobre sus manos." [14]

Fue en este momento que se reveló la siguiente aleya:

"¡Y cuántos profetas ha habido junto a los cuales combatieron muchos hombres de Dios! Pero no se desanimaron por lo que les sucedió en el camino de Dios, ni expresaron debilidad ni se rindieron. Y Dios ama a los que tienen paciencia." [15]

Infundir miedo en los corazones de los politeístas

Según muchos historiadores, cuando el ejército del Islam llegó a la región de Hamra al-Asad, el Profeta (PBD) ordenó a los musulmanes que recogieran leña y, al caer la noche, todos debían encender su leña.
El encendido de quinientas hogueras durante la noche hizo que los politeístas pensaran que el número de musulmanes había aumentado, lo que infundió miedo en sus corazones. [16]. Cuando los paganos de La Meca llegaron a la región de Ruha y planeaban atacar nuevamente, se encontraron con una persona llamada Ma’bad. [17]. Le preguntaron sobre las noticias del ejército musulmán, y él habló sobre la alianza de los musulmanes para vengarse, recitando epopeyas que destacaban la grandeza del ejército musulmán. Esto generó temor en el corazón de Abu Sufyan y los disuadió de atacar nuevamente a Medina. [18]. Según Rawandi, Ma’bad le informó a Abu Sufyan que Alí Ibn Abi Talib (P) estaba en la vanguardia del ejército, lo que llevó a Abu Sufyan a desistir de su ataque. [19].
En algunas fuentes se menciona que, tras la retirada de los politeístas de La Meca, Ma’bad envió a un hombre al Profeta (PBD) para informarle que Abu Sufyan y sus compañeros habían huido a La Meca. [20]. Según la narración de Tafsir Qomi, después de que los politeístas huyeron, el Arcángel Gabriel descendió sobre el Profeta (PBD) y le ordenó regresar a Medina. [21]. Según Tabari, esta expedición duró tres días. [22].

Revelación de los versículos sobre la batalla de Hamra al-Asad

Ibn Shahr Ashub narra de Abu Rafi a través de muchos narradores: [23]
Cuando los politeístas regresaron de la batalla de Uhud, dijeron:

"No capturamos a sus mujeres (ni las saqueamos), ni matamos a Muhammad; debemos volver a la batalla para completar lo que quedó pendiente."

Esta noticia llegó al Mensajero de Dios (PBD), quien eligió a Alí (P) para avanzar hacia los politeístas, a pesar de estar muy herido. Los politeístas aún no habían abandonado el lugar cuando el Imam Ali (P) llegó a ellos. Fue en relación a este evento que Dios reveló estos versículos:

"Aquellos que respondieron a Dios y al Mensajero, después de haber recibido heridas (en Uhud); para los que actuaron bien y temieron a Dios hay una recompensa inmensa. Aquéllos a quienes la gente dijo: 'La gente se ha reunido contra vosotros, ¡así que temedles!'. Pero esto les aumentó la fe y dijeron: '¡Dios es suficiente para nosotros! ¡Y qué excelente Comendador es!' Y luego regresaron con una bendición de Dios y favor, mientras que no les tocó ningún mal y buscaban la Complacencia de Dios; y Dios es el Poseedor del favor inmenso." [24]

En varias exégesis y fuentes históricas se afirma que los versículos 172 a 174 de la Sura Al-Imran fueron revelados sobre la batalla de Hamra al-Asad. [25]. También se ha mencionado que el versículo 140 de la Sura Al-Imran y el versículo 104 de la Sura Nisa también tratan sobre la misma batalla. [26]

Referencias

  1. Waqidi, al-Maqazi, 1409 H, volumen 1, página 334
  2. Dhahabi, Historia del Islam, 1409 H, volumen 2, página 223; Miqrizi, Imtaa al-Asma, 1420 H, volumen 1, página 178
  3. Diyar al-Bakri, Tarij al-Jamis, Beirut, volumen 1, página 447
  4. Ibn Kathir, al-Bidaiya wa al-Nahaiya, Beirut, volumen 4, página 48; Miqrizi, Imtaa al-Asma, 1420 H, volumen 1, página 178; Ayati, Historia del Profeta del Islam (PBD), página 345
  5. Qomi, Tafsir al-Qami, 1404 H, volumen 1, página 124
  6. Qomi, Tafsir al-Qami, 1404 H, volumen 1, página 124
  7. Amin, A’yan al-Shia, 1403 H, volumen 1, página 259
  8. Dhahabi, Historia del Islam, 1409 H, volumen 2, página 223; Mushat, Inarat al-Duya, 1426 H, página 318
  9. Waqidi, al-Maqazi, 1409 H, vol.1, p.335
  10. Miqrizi, Imtaa al-Asma, 1420 H, vol.1, p.178
  11. Mushat, Inara al-Duya, 1426 H, pág.320
  12. Ibnshahr Ashub, al-Manaqib, 1379 H, vol.1, p.163; Ibn Kathir, al-Badaiya wa al-Nahaiya, Beirut, vol. 4, pág.49
  13. Qutbuddin Ravandi, Historias de los profetas (P), 1409 H, pág.343
  14. Maylisi, Hayat al-Qulub, volumen 4, páginas 994-993
  15. Ver: Sura Ale ‘Imran, versículo 146
  16. Miqrizi, Imtaa al-Asma, 1420 H, vol.1, p.180; Waqidi, al-Maqazi, 1409 H, vol. 1, pág. 338; Amin, Ayan al-Shia, 1403 H, vol. 1, pág.259
  17. Waqidi, al-Maqazi, 1409 H, vol.1, p.338
  18. Dhahabi, Historia del Islam, 1409 H, vol.2, p.223; Waqidi, al-Maqazi, 1409 H, vol. 1, pág.338; Tabari, Tarij al-Umm y al-Muluk, 1387 H, vol.2, p.535
  19. Qutbuddin Rawandi, Historias de los profetas (P), 1409 H, pág.343
  20. Miqrizi, Imtaa al-Asma, 1420 H, vol.1, p.181
  21. Qomi, Tafsir al-Qomi, 1404 H, vol.1, p.124
  22. Tabari, Tarij al-Umm wa al-Muluk, 1387 H, vol.2, p.536
  23. Al-Burhan fi Tafsir al-Qur’an, Volumen 1, página 713
  24. Ver: Sura Ale ‘Imran, versículos 172-174
  25. Tabarsi, Mayma al-Bayan, 1426 H, vol.2, p.357; Waqidi, al-Maqazi, 1409 H, vol. 1, pág. 340; Baihaqi, Dalail al-Nubuwwa, 1405 H, vol. 3, pág.317
  26. Tusi, Al- Tibian, Beirut, vol.3, p.5128

Bibliografía

  • Amin, Sayyed Mohsen, A’yanal- Shi'a, Beirut, 1403 H.
  • Ayati, Mohammad Ibrahim, Historia del Profeta del Islam (PBD), Teherán, Universidad de Teherán, sexta edición, 1378 s.
  • Baihaqi, Dalail al-Nubuwwa, Beirut, Dar Al-Kutub al-Alamiya, primera edición, 1405 H.
  • Dhahabi, Shams al-Din, Tarij al-Islam, Beirut, Dar al-Kitab al-Arabi, segunda edición, 1409 H.
  • Diyar Bakri, Husain, Tarij al-Jamis fi Ahval Anfas al-Nafis, Beirut, Dar al-Sadir.
  • Ibn Kathir, Hafez Ibn Kathir, Al-Bidaiya wa Al- Nahaiya, Beirut, Dar al-Fikr.
  • Ibnshahr Ashub, Muhammad Ibn Ali, al-Manaqib, Qom, Al-lame, 1379 H.
  • Miqrizi, Ahmad Ibn Ali, Imtaa al-Asma, Investigación de Muhammad Abd al-Hamid, Beirut, Dar al-Kitab al-Alamiya, primera edición, 1420 H.
  • Mushat, Hasan Ibn Muhammad, Inara al-Duya, Yeda, Dar al-Manhay, segunda edición, 1426 H.
  • Qomi, Ali Ibn Ibrahim, Tafsir al-Qomi, corregido, Tayyib Musavi Al-Yazairi, Qom, Dar al-Kitab, tercera edición, 1404 H.
  • Qutbuddin Rawandi, Saeed Ibn Hibatullah, Historias de los profetas, Mashhad, Centro de Investigación Islámica, primera edición, 1409 H.
  • Tabari, Muhammad Ibn Yarir, Tarij al-Umm wa al-Muluk,, Beirut, Dar al-Turaz, segunda edición, 1387 H.
  • Tabarsi, Fazl Ibn Hasan, May’ma al-Bayan fi Tafsir al-Qur'an, Beirut, Dar al-Ulum, 1426 H.
  • Tusi, Muhammad Ibn Hasan, al-Tibian fi Tafsir al-Qur'an, corrector, Ahmad Habib Ameli, Beirut, Dar Ihya al-Turaz al-Arabi,
  • Waqidi, Muhammad, al-Maqazi, Beirut, Alami, tercera edición, 1409 H.