Castigo de la tumba
El castigo de la tumba (en árabe: عذاب القبر) consiste en las penurias y presiones que después de la muerte afligen al ser humano en el mundo de Barzaj (es decir, el mundo intermedio entre este mundo y el más allá). Según los hadices, los castigos de la tumba son resultados de actos como el chisme, descuido sobre las leyes de la pureza y la suciedad, el maltrato de una persona a su familia, y menospreciar las oraciones diarias. Por otro lado, estos castigos se pueden aliviar o eliminar con ciertos actos y motivos tales como la Ziyarat del Imam Husain (P) y el amor por la familia del Profeta (PBD).
En las fuentes islámicas existen varias evidencias que hacen referencia al castigo de la tumba, entre ellas, la aleya coránica que dice:
- “Dirán: «¡Señor nuestro! Nos has hecho morir dos veces y nos has dado la vida dos veces. Admitimos nuestros pecados. ¿Hay un camino para salir?»”. [1]
También se ha narrado que el Profeta (PBD) dijo:
- La tumba puede ser un jardín de los jardines del Paraíso, o uno de los hoyos del Fuego del Infierno.[2]
Significado
El castigo de la tumba consiste en las dificultades y presiones que sufre el ser humano después de la muerte. El mundo de la tumba que también se conoce como “el Barzaj”, comienza desde el entierro de los muertos y dura hasta el día de la resurrección.[3] Según los hadices, el castigo de la tumba, puede tener diferentes formas tales como el ardor del fuego, la presión de la Tierra, las picaduras de las criaturas y un enorme horror en la soledad y la oscuridad de la tumba.[4]
Se ha narrado en un hadiz que el Imam Sadiq (P) dijo que, el castigo de la tumba no se limita a aquellos que están enterrados en la Tierra, sino que incluye a todos los que mueren, incluso si no están enterrados bajo tierra.[5] Además, según otro hadiz del Imam Sadiq (P), la mayoría de los seres humanos sufren el castigo de la tumba.[6]
En algunas súplicas transmitidas por los Imames Infalibles (P), el suplicante se refugia en Dios del castigo de la tumba.[7] Con base en ciertos hadices, cuando el Profeta (PBD) enterró a su hija Ruqayya, oró para que Dios le quitara el castigo de la tumba.[8]
Motivos y actos que causan el castigo de la tumba
Según un hadiz del Imam 'Ali (P), el castigo de la tumba es ocasionado por el chisme, orinar sin observar las leyes de la pureza y el maltrato del hombre a su esposa.[9]
Al respecto, el Sheij 'Abbas Qomi cree que la gran parte del castigo de la tumba es debido a los tres factores mencionado en este hadiz.
Otras cosas que podrían ocasionar tal castigo incluyen:
- El maltrato de una persona a su familia: según un hadiz del Profeta (PBD), la razón por la que Sa'd Ibn Ma'az sufrió el castigo de la tumba fue el maltrato a su familia.[10]
- Menospreciar la oración: según un hadiz, la indolencia y la negligencia con respecto a la realización de las oraciones diarias resulta en la presión de la tumba.[11]
- Desperdiciar las bendiciones de Dios:[12] según un hadiz, el castigo de un creyente en la tumba es una expiación por las bendiciones que ha desperdiciado.[13]
Según otras narraciones, el castigo de la tumba es ocasionado por los siguientes motivos:
- El chisme,[14]
- Rechazar o no aceptar el Wilayat de los Imames Infalibles (P),[15]
- No ayudar a los oprimidos[16]
- Realizar las oraciones sin ablución.[17]
En el libro Yami' al-sa'adat se ha mencionado que si la madre de una persona no está contenta con ella, y el castigo de su tumba serán más fuertes.[18]
Alivio del castigo de la tumba
En los libros de hadices, se ha mencionado que el castigo de la tumba se puede aliviar o eliminar debido a ciertos motivos tales como los siguientes:
- El amor por la Familia del Profeta (PBD): según un hadiz del Profeta (PBD), el amor por el Profeta (PBD) y su Familia es beneficioso para el hombre en siete ocasiones, una de las cuales es en la tumba.[19]
- Realización de ciertas oraciones recomendables: se ha narrado que realizar ciertas oraciones recomendables en los meses de Rayab y Sha'ban elimina el castigo de la tumba. (Estas oraciones se han mencionado en el libro de Iqbal al-A'mal y también en Mafatih al-Yinan)[20]
- Ser enterrado en Nayaf: en las fuentes islámicas hay hadices en el sentido de que la tierra de Nayaf elimina el castigo de la tumba y el interrogatorio de Nakir y Munkar.[21]
- Recitación del Corán: hay hadices sobre las virtudes de las suras coránicas en el sentido de que recitar ciertas suras elimina el castigo de la tumba; en especial, se ha hecho hincapié en la recitación de la Sura al-Zujruf y Sura al-Nisa' todos los viernes y la recitación de Sura al-Takazur antes de dormir.[22]
Otros casos que conducen al alivio o remoción del castigo de la tumba incluyen:
- La Ziyarat del Imam Husain (P) y visitar su santuario[23]
- Realizar la inclinación en forma completa, en la oración[24]
- Realizar la oración de la medianoche[25]
- Ayunar durante cuatro días del mes de Rayab[26]
- Morir en el tiempo entre el mediodía del jueves y el mediodía del viernes[27]
- La tolerancia de una mujer hacia el maltrato de su marido o su pobreza.[28]
- La renuncia de una mujer a su derecho a la dote, en favor de su esposo[29]
- Las buenas obras que una persona realiza en nombre de sus padres después de su muerte.[30]
¿Castigo del cuerpo físico o del cuerpo del otro mundo?
Según la mayoría de los teólogos y estudiosos, el espíritu del ser humano después de la muerte se adherirá otro cuerpo que pertenece al mundo del Barzaj, un cuerpo parecido al cuerpo mundano, excepto que carece de su materia y de sus características como el peso y la masa. Sin embargo, algunos teólogos sostienen que después de la muerte, el espíritu regresa al cuerpo físico, y el cuerpo mundano experimenta la presión de la tumba.[31]
El siguiente versículo ha sido mencionado en libros de teología como evidencia del castigo de la tumba:
- Dirán: «¡Señor nuestro! Nos has hecho morir dos veces y nos has dado la vida dos veces. Admitimos nuestros pecados. ¿Hay un camino para salir?». [32]
Ellos argumentan que la primera muerte es en este mundo y la segunda muerte es en el sepulcro, y el primer caso de dar vida es en el sepulcro y el segundo caso es en el día de la resurrección.[33]
Además, algunos exegetas dicen que el siguiente versículo alude al castigo de la tumba:
- Pronto les castigaremos dos veces. Luego serán destinados a un castigo inmenso.[34]
Se argumenta que uno de los dos castigos es el de la tumba y el otro es el de la Resurrección.[35]
Según 'Al-lama Tabataba’í, el siguiente versículo habla del castigo de la tumba para Faraón y sus seguidores:
- el fuego al que se verán siempre expuestos, mañana y tarde. Y el día en que llegue la Hora: «¡Haced entrar a la gente del Faraón en lo más severo del castigo!»[36]
Esta aleya implica que la gente del Faraón sería expuesta primero al fuego, y luego entraría a otro castigo, donde el primero puede interpretarse como castigo de la tumba, y el otro, como castigo de la Resurrección.[37]
Referencias
- ↑ Corán 40:11
- ↑ Irshad al-Qulub, tomo 1, pág. 75
- ↑ Al-lama Tabatabai, Al-Mizan, 1417 H, tomo 15, página 68.
- ↑ Qomi, Manazil al-Ajira, págs. 137-149.
- ↑ Sheij Saduq, Man la yahzuruhul Faqih, 1988, vol. 1, p. 279.
- ↑ Al-lama Maylisi, Bihar Al-Anwar, 1403 H, tomo 6, página 261
- ↑ Por ejemplo, ver: Kulaini, Al-Kafi, 1407 H, tomo 2, página 526; Ibn Tawus, Iqbal al-A'mal, 1409 H, tomo 1, págs. 338, 439.
- ↑ lama Maylisi, Bihar Al-Anwar, 1403 H, tomo 6, página 261.
- ↑ Sheij Saduq, Causas de la Sharia, 1385, tomo 1, página 310; Al-lama Maylisi, Bihar Al-Anwar, 1403 H, tomo 6, página 245, nota al pie.
- ↑ Al-lama Maylisi, Bihar Al-Anwar, 1403 H, tomo 6, página 261.
- ↑ Meshkini, Mawa’iz al-Adadiya, 2003, págs. 232-233.
- ↑ Sheij Saduq, Ilal al-Sharaye’, 1385, tomo 1, página 309.
- ↑ Sheij Saduq, Al-Amali, 1997, página 50.
- ↑ Al-lama Maylisi, Bihar Al-Anwar, 1403 H, tomo 6, página 245.
- ↑ Ver: al-lama Maylisi, Bihar Al-Anwar, 1407 H, tomo 6, página 262.
- ↑ Sheij Saduq, Man la yahzuruhul al-Faqih, tomo 1, 1413 H, página 58.
- ↑ Sheij Saduq, Man la yahzuruhul al-Faqih, tomo 1, 1413 H, página 58; Ilal al-Sharaye’, 1385, tomo 1, página 309.
- ↑ Naraqi, Yami' al-sa'adat, tomo 2, página 263.
- ↑ Al-lama Maylisi, Bihar Al-Anwar, 1403 H, tomo 7, página 248
- ↑ Por ejemplo véase: Iqbal al-A'mal, tomo 2, págs. 629 , 656, 665, 683, 723.
- ↑ Deilami, tomo 2, p. 439
- ↑ Al-lama Maylisi, Bihar Al-Anwar, 1403 H, tomo 89, página 336.
- ↑ Kamel Al-Ziyarat, 1977, págs. 142-143.
- ↑ -Kafi, 1407 H, tomo 3, página 321.
- ↑ Qomi, Safinat al-Bihar, 1378, tomo 2, página 397.
- ↑ Iqbal al-A'mal, 1409 H, tomo 2, página 651.
- ↑ Sheij Saduq, Man la yahzuruhul Faqih, 1988, vol. 1, p. 83.
- ↑ Meshkini, Mawa’iz al-Adadiya, 2003, página 75.
- ↑ Meshkini, Mawa’iz al-Adadiya, 2003, página 75.
- ↑ Kafi, 1407 d. H., vol. 6, págs. 3-4.
- ↑ Malayeri, pp. 109-115.
- ↑ Corán 40:11.
- ↑ Al-lama Maylisi, Bihar Al-Anwar, 1403 H, tomo 6, página 211.
- ↑ Sura Tawba, aleya 101.
- ↑ Tabarsi, Majma 'al-Bayan, 1372, tomo 5, página 100.
- ↑ Sura Qafir aleya 46.
- ↑ Tabatabai, Al-Mizan, 1417 H, tomo 17, página 335.
Bibliografía
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