Jatm del Corán

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Jatm del Corán (en árabe: ختم القرآن, en español: lectura completa del Corán) es una práctica recomendable que consiste en la recitación de todo el Sagrado Corán desde el principio hasta el fin. De acuerdo con las narraciones islámicas se han mencionado numerosas recompensas y efectos espirituales para esta práctica. En las sociedades islámicas, este acto se realiza tanto en forma individual como en colectiva, en especial en el mes de Ramadán, en el que los musulmanes cada día recitan por lo menos una parte de las treinta partes del Corán.

Significado

En árabe, el término "Jatm" literalmente significa llegar al final de algo o terminar con algo.[1] Según su significado literal, Jatm al-Corán significa leer el Corán desde el principio hasta el fin.[2]

En el Corán y las narraciones

Recitación del Corán se menciona en los versículos coránicos, tal como el siguiente:

“Recitad lo que podáis del Corán.” (Corán 73: 20)

Según un hadiz narrado del Imam al-Sadiq (P), la expresión " lo que podáis" (مَا تَيَسَّرَ) en este versículo se refiere a la recitación del Corán con atención cordial. Además, el Imam Alí (P) dijo que en la recitación del Corán, la prioridad es comprender y reflexionar sobre el significado de los versículos coránicos en lugar de leer solamente sus palabras.

Recompensas

Las recompensas por la recitación del Corán se han mencionado en numerosos hadices, muchos de los cuales hablan sobre la importancia de su recitación en ciertos momentos y lugares, por ejemplo, durante el mes de Ramadán y en la ciudad de La Meca.[3]

Es narrado en los hadices que cada cosa tiene su primavera y que la primavera del Corán es el Mes de Ramadán. Es meritorio en este Mes completar la lectura del Corán aunque sea una vez. Basado en un famoso hadiz narrado por el Profeta Muhammad (PBD), a quien recite todo el Corán, le será respondida su súplica.[4]

Según algunas narraciones, si alguien recita tres veces la sura al-Ijlas, tiene la recompensa de la recitación completa del Corán.[5] También, si alguien recita una sola aleya durante el mes de Ramadán, por cada aleya tiene la recompensa de la lectura completa del Corán. [6]

Protocolos

La recitación del Corán se debe realizar con rituales especiales, por ejemplo, se recomienda comenzar la recitación del Corán los viernes.[7] Se recomienda recitar el Corán desde el principio hasta el fin durante tres días o una semana, ya que comprender los versículos coránicos es mucho más importante que solamente leer sus palabras. [8] Recitar el Corán con la pronunciación correcta se considera como uno de los protocolos de esta práctica, aunque seguir las reglas de Taywid (pronunciación de las letras árabes) no es obligatorio.
Se recomienda observar los siguientes protocolos en el momento de la recitación del Corán:

  • Realizar la ablución,
  • Cepillarse los dientes,
  • Sentarse hacia la Qibla,
  • Buscar refugio en Dios del mal de Satanás,
  • Recitar el Corán en forma de Tartil,
  • Pensar y reflexionar sobre los significados de las aleyas,
  • Recitar con voz triste,
  • Expresar humildad ante Dios en el momento de la recitación,
  • Recitar las súplicas recomendables antes de comenzar y después de la recitación.[9]

La recitación del Corán se recomienda mucho para aquellos que realizan el Hayy en el momento de su estancia en La Meca. En un hadiz, se dice, aquellos que recitan el Corán en La Meca, desde el principio hasta el fin, verán al Profeta Muhammad (PBD) y su situación en el paraíso antes de su muerte.[10]

En forma colectiva

Ceremonia de Jatm del Corán durante el mes de Ramadán en el Santuario de Fátima Ma'suma (P)

Generalmente en las mezquitas de las comunidades islámicas, los musulmanes recitan una página del Corán inmediatamente después de realizar sus oraciones. Esta obra se hace colectivamente en santuarios sagrados. [11] También en las ceremonias de conmemoración por los difuntos, los participantes recitan una parte del Corán y regalan la recompensa al difunto.

Súplicas recomendables antes de la recitación del Corán

Según un hadiz narrado del Profeta (PBD), es recomendable recitar esta súplica antes de empezar la recitación coránica:

“¡Oh Dios! ¡Has revelado el Corán con la verdad y este libro ha sido revelado correctamente, ¡Oh Dios! Aumenta mi anhelo por el Corán y haz que sea una luz para mis ojos y una curación para mi corazón y que sea la eliminación de mi tristeza. ¡Oh Dios! Embellece mi lengua con la recitación del Corán, y embellece mi rostro gracias a ello, y fortalece mi cuerpo por ello, y haz pesada la medida de mis obras buenas por el Corán, y haz que la lectura del Corán sea mi sustento en el día y en la noche con el éxito de la obediencia a Ti, y resucítame en el más allá con Tu Profeta (PBD).” [12]

Se ha narrado que cada vez que el Imam Sadiq (P) tomaba el Corán en su mano, antes de abrirlo y recitarlo, oraba y decía:

“¡Oh Dios! Doy testimonio de que este es el mismo libro que le fue revelado a Tu profeta, Muhammad Ibn Abdil-lah (PBD), y (testifico que) fueron Tus elocuentes palabras las que fluyeron en la lengua de Tu profeta; Has hecho del Corán una guía para la creación y una cuerda de conexión entre Tú y Tus siervos. ¡Oh Dios! Yo abrí Tu libro, el libro de Tu pacto; ¡Oh Dios! Haz que mi mirada en el Corán se considere una adoración y que mi lectura sea con pensamiento y reflexión sobre él, y haz que a través del pensamiento en el Corán, tome una lección. Hazme uno de los que han tomado el consejo de Tus instrucciones en el Corán y han evitado Tu desobediencia. (¡Oh Dios!) Cuando recito el Corán, no pongas un sello en mis oídos y un velo en mis ojos, y no hagas de mi lectura una lectura que no tiene pensamiento; Más bien, concédeme el éxito de pensar en los versículos e instrucciones del Corán y adherirme a las reglas y regulaciones de Tu religión. No hagas que mi mirada en este libro sea con negligencia o que mi lectura sea en vano. En verdad, Tú eres verdaderamente amable y misericordioso.” [13]

Súplicas después de la Recitación del Corán

Las súplicas de la recitación del Corán se pueden hacer al final de cada sura. Algunas de estas súplicas han sido narradas por los Imames Infalibles (P), entre ellas, se destacan las siguientes:

  • La súplica cuadragésima segunda de Sahifa al-Sayyadiyya es la súplica más conocida y más completa para la Recitación del Corán.
  • Una súplica del Imam Sadiq (P) para Recitación del Corán que empieza con esta frase:
"... أللهم انی قد قرأت ماقضیت من كتابك "
(Oh Dios, he recitado lo que Tú has decretado de Tu Libro...).[14]

Zar Ibn Habish narra: Recité el Corán desde el principio hasta el final en presencia del Imam Ali (P) en la Gran Mezquita de Kufa. Cuando llegué al versículo 22 de la Sura "al-Shura" , el Imam lloró y las lágrimas se derramaban por su rostro. Entonces miró al cielo y dijo: “¡Yo oro! y tú di Amén”. Luego recitó esta súplica:

“¡Oh Dios! Te pido que me otorgues la devoción de los devotos, la sinceridad de los sinceros, la compañía de los justos, el mérito de recibir las verdades de la fe, gozar de todos los bienes y permanecer inmune a todos los pecados. Te pido que hagas obligatoria para nosotros Tu misericordia, y que nos concedas Tu gran perdón, la prosperidad, la morada de Tu Paraíso, y la salvación del fuego del infierno.”

Al final, el Imam Ali (P), me dijo:

" Cada vez que termines la recitación del Corán, lee esta súplica; Porque mi amigo y amado Profeta, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él y su familia, me ordenó orar con estas palabras al final de la recitación del Corán.” [15]

En otro hadiz se ha narrado que el Imam Ali (P) siempre recitaba esta súplica después de terminar la recitación del Corán: ¡Dios! Expande mi corazón con el Corán, pon mi cuerpo al servicio del Corán, ilumina mi vista con el Corán, y haz que mi lengua se articule con el Corán, y ayúdame de esta manera mientras yo me encuentre con vida porque no hay poder excepto de Ti. [16] Se ha narrado que el Imam Sadiq (P) recitaba la siguiente súplica al terminar la recitación del Corán:

“¡Oh Dios! De hecho, recité lo que dijiste en Tu libro; El mismo libro que enviaste a Tu profeta veraz, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él y su familia. ¡Alabado seas; Oh mi señor! ¡Oh Dios! Hazme uno de los que consideran permitido lo halal del Corán, y consideran prohibido lo haram del Corán, y creen en todas sus aleyas, ya sean con significados categóricos o ambiguos. Y haz que el Corán sea mi compañero en mi tumba y cuando resucite, y también hazme de aquellos que, debido a la recitación de cada versículo, los elevarás en las posiciones (celestiales) más altas y aumentarás su rango en las más altas posiciones. ¡Por Tu misericordia, Oh el más misericordioso de todos los que muestran misericordia.” [17]


Referencias

  1. ↑ Lisan al-Arab, palabra: ختم
  2. ↑ Rey Shahri, tomo 3, p. 383
  3. ↑ Rey Shahri, tomo 3, p. 384
  4. ↑ Haysami Misri, tomo 7, p. 256
  5. ↑ Sheij Saduq, p. 86
  6. ↑ Uyun Ajbar Rida, tomo 1, p. 296
  7. ↑ Misbah al-Mutahayyid, p. 322
  8. ↑ al-Kafi, tomo 2, p. 618
  9. ↑ Ver: Mohammadi Rey Shahri, Mizan al-Hikma, volumen 8, sección “Qur’an”
  10. ↑ al-Kafi, tomo 2, p. 612
  11. ↑ Jatm Qur’an, Nasim Wahy, 1386, p. 6
  12. ↑ Hasan Biglari, Sirr al Bayan fi Ilm al-Qur’an, pp. 236 y 237, islamiya, 1338 s
  13. ↑ Maylisi; Bihar Al-Anwar, vol. 92, pág. 207
  14. ↑ Bihar al-Anwar, tomo 92, p. 297
  15. ↑ Maylisi, Bihar al-Anwar, vol. 92, págs. 206 y 207
  16. ↑ Bihar al-Anwar, volumen 92, página 209
  17. ↑ Bihar al-Anwar, volumen 92, página 209

Bibliografía

  • Jatm Qur'an, Revista Nasim Wahy, no 7, 1386 S.
  • Kulaini, Muhammad Ibn Ya'qub, al-Kafi.
  • Maylisi, Muhammad Baqir, Bihar al-Anwar, Beirut, 1983.
  • Rey Shahri, Muhammad, Shenajt Name Qur’an, Qom, 1391 S.
  • Rey Shahri, Mohammad, Mizan al-Hikma, Publicaciones Dar al-Hadith.
  • Sahifa al-Sayyadiya
  • Sheij Saduq, Amali, Qom, 1417 H.
  • Sheij Saduq, Uyun Ajbar al-Rida, Qom, 1363 S.
  • Sheij Tusi, Muhammad Ibn Hasan, Misbah al-Mutahayyid, Beirut, 1991.
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