Wilayat
El Wilayat (en árabe: الولاية) significa literalmente tener tutela y autoridad para administrar y modificar los asuntos de los demás. En la terminología Shi'a, se refiere al liderazgo de los Imames Infalibles (P) y a su tutela sobre la gente. El Wilayat puede ser de dos tipos: el Wilayat sobre la creación y el Wilayat sobre la religión. El Wilayat sobre la creación o el “Wilayat existencial” hace referencia a la tutela del Imam sobre las criaturas del mundo y a su poder para influir en ellos.
El Wilayat sobre la religión o el “Wilayat legislativo” es la tutela del Imam para dirigir y administrar la sociedad basado en las enseñanzas del Corán y en la conducta del Profeta Muhammad (PBD).
El Sagrado Corán confirma que el derecho del Wilayat pertenece a Allah. Él es quien puede dar este derecho a quien quiera. Además, basado en las fuentes islámicas, Dios ha concedido el derecho del Wilayat a los Profetas, a los Imames y a los representantes de los Imames (P).
Según la doctrina islámica, los mandatos del poseedor del derecho del Wilayat se consideran como leyes auténticas que deben ser obedecidas por la gente.
Definición del Wilayat
El término Wilayat (ولایت) en árabe hace referencia a la intimidad[1] y tutela. Esta palabra es derivada de la raíz Wali (ولی) que tiene significados diferentes. Algunos de estos significados son los siguientes: protector, dominante, administrador, el que puede modificar las cosas, devoto, el más apropiado, cercano, amigo, ayudante, seguidor leal, socio en un contrato y liberador.[2]
Desde el punto de vista terminológico, el Wilayat es una forma de tutela y proximidad que da un tipo específico de permiso para la administración de los asuntos asociados con los demás.[3]
¿Acaso el hombre puede tener el privilegio del Wilayat?
Según el Corán, Dios es el creador del ser humano y su Señor, y Él tiene el derecho del Wilayat sobre sus criaturas; así como de modificar sus asuntos. Por lo tanto, el Wilayat en todas sus formas pertenece a Dios, Él es el único que es su Wali y nadie más tiene el derecho a tener Wilayat sobre los siervos de Dios, sin Su permiso.
Algunas personas aceptan este Wilayat y se someten bajo la tutela de Dios, mientras que hay otros que huyen del Wilayat de Dios y se someten bajo la tutela de Satanás. Son los creyentes quienes han aceptado el Wilayat de Allah, y por lo tanto; Él garantiza dirigirlos hacia la prosperidad y la felicidad eterna. El sagrado Corán dice a este respecto:
- Dios es el Wali (protector) de los creyentes, los saca de las tinieblas hacia la luz. (Corán, 2: 257)
Sin embargo, aquellos que no han aceptado la tutela de Dios, en realidad han aceptado la tutela de los ídolos:
- Aquellos que no creen, tienen como Wali (protector) a los falsos ídolos que los llevan de la Luz a las tinieblas. Esos son la gente del Fuego en el cual estarán eternamente. (Corán, 2: 257)
Según el Corán, sólo Dios tiene la autoridad de modificar y controlar los asuntos del mundo. Él es el único que puede determinar y definir las leyes divinas y los principios que forman la base legislativa de la religión, con el fin de guiar a la humanidad hacia la felicidad de la vida eterna.
Cabe destacar, que a veces Dios confía Su Wilayat a algunos de sus siervos escogidos. Sin embargo este Wilayat no es paralelo al Wilayat de Dios, sino más bien una rama del mismo. Estos individuos implementan este Wilayat de una manera que Dios quiere y está complacido. [4]
Tipos de Wilayat
El Wilayat existencial
El Wilayat existencial (en árabe: الولاية التكوينية) o el Wilayat sobre la creación es una autoridad que permite a su titular administrar y modificar los asuntos de todas las cosas de cualquier manera que quiera. Este tipo de Wilayat significa poseer el poder de afectar los asuntos y tener la capacidad de administrar el orden natural del mundo y de alterar su sistema habitual.[5]
El Wilayat sobre la creación pertenece solo a Dios, y es solo Él quien tiene el poder de controlar el mundo conforme a Su voluntad. [6]
En cuanto al Wilayat existencial de Dios, el Sagrado Corán dice:
- Él es el Creador de los cielos y de la Tierra. Cuando decreta un asunto, le dice: « ¡Sé!» y es. (Corán, 2: 117)
El Sagrado Corán, en muchas aleyas, proclama que el Wilayat pertenece únicamente a Dios y que aceptar el Wilayat de los demás no tiene ningún beneficio y sólo provoca pérdidas y decepción. En un versículo dice que los opresores no tienen Wali (protector) o ayudante, y Dios ha condenado severamente a aquellos que toman a otros como su protector en lugar de Dios.[7]
El Wilayat legislativo
El Wilayat legislativo (en árabe: الولاية التشريعية) tiene un significado general y un significado específico. Su significado general es cualquier forma de tutela que no requiera la interferencia en los asuntos de la creación. Al contrario del Wilayat existencial, la aceptación del Wilayat legislativo es voluntaria. En otras palabras, las personas tienen la capacidad de aceptar o rechazar este Wilayat. Este Wilayat consiste en la religión y las leyes de Dios. El Corán dice a este respecto:
- No cabe coacción en religión. El buen camino ha quedado claramente diferenciado del extravío. Así que quien descrea de los falsos dioses y crea en Dios, se habrá aferrado al asidero más firme, en el que no hay fisuras. Dios todo lo oye, todo lo sabe. (Corán, 2: 256)
Al-lahmah Tabataba'í, al explicar esta forma del Wilayat, dice: El Wilayat legislativo significa legislar, predicar las leyes para la gente, desarrollar la comunidad, gobernar y juzgar. Utilizando este significado del Wilayat, Dios ha llamado a Sus Profetas (P) como Wali (guardianes) de los creyentes. [8]
En su significado específico, el Wilayat legislativo significa establecer y designar las leyes y las reglas de la religión. Esta Wilayat tiene muchas ramas diferentes, algunas de las cuales son específicas del Profeta Muhammad (PBD), mientras que según las narraciones este tipo de Wilayat también ha sido confiado a los Imames (P).[9]
Según los hadices, el Profeta (PBD) y los Imames (P) tienen la autoridad de enunciar leyes y regulaciones. Por ejemplo, el tercer y cuarto ciclo de la oración se hicieron obligatorios por la orden del Profeta (PBD). También, durante un período del Califato del Imam Alí (P), la ley del Azaque por los ganados se aplicó también para los caballos. Esta decisión del Imam Alí (P) fue en forma de un decreto gubernamental por la autoridad que Dios le había otorgado.
Wali
El Wali es aquel que posee la autoridad del Wilayat y según las fuentes islámicas puede referirse a los siguientes:
- Dios: Dios es el verdadero Wali y protector, cuyo Wilayat es independiente y no ha sido derivado de nadie; ni de nada. El Sagrado Corán en muchos versículos alude a este asunto como se puede ver en el versículo 257 de Sura al-Baqara.
- Los Profetas (P): El Wilayat de los Profetas (P) es una extensión del Wilayat de Dios, y es válido solamente por medio de su permiso. En otras palabras, es por la voluntad de Dios que ellos disponen del permiso de modificar los asuntos de la creación. Este Wilayat también permite designar leyes y regulaciones.
- Los Imames infalibles (P): El Wilayat de los Imames infalibles (P) es una extensión del Wilayat del Profeta (PBD); y es por lo tanto que ellos tienen la autoridad de modificar algunos asuntos en la creación. Su Wilayat incluye el Wilayat existencial, el Wilayat legislativo y el liderazgo de la comunidad en los asuntos religiosos y políticos.
- El Wilayat del Faqih calificado: Según las narraciones, algunos Sabios Jurisprudentes Islámicos que poseen las cualificaciones relevantes, tienen la autoridad para implementar un tipo del Wilayat legislativo. Este tipo de Wilayat es conocido como el Wilayat del Faqih.
En las fuentes jurisprudenciales, un tipo limitado del Wilayat ha sido prescrito para un grupo especial de personas, por ejemplo el Wilayat que un padre o abuelo paterno tiene sobre su hijo o nieto o el Wilayat del tutor sobre una persona demente. La diferencia entre este Wilayat y los anteriores es que el Wilayat de estas personas es muy limitado y es aplicable solo en casos específicos.
La característica fundamental del Wilayat de los Profetas e Imames (P)
Una de las características que no se puede separar de los Profetas e Imames (P) que tienen el privilegio del Wilayat, es el hecho de que sus discursos y palabras deben ser considerados como pruebas auténticas y decisivas. Una persona que tiene el Wilayat, puede ser seguida y obedecida por lo demás.
Aleya del Wilayat
La aleya del Wilayat es el versículo 55 de la Sura al-Ma'ida y se considera como una evidencia coránica que demuestra el Imamato y el Liderazgo (Wilayat) del Imam Alí (P). El contenido de esta aleya es el siguiente:
- En verdad, vuestro Wali (protector) es solamente Dios y Su Mensajero y aquellos que tienen fe, que hacen la oración y dan limosna mientras están inclinados rezando. (Corán: 5: 55)
Según los hadices mencionados en las fuentes shiítas y sunitas, esta aleya fue revelada en relación al Imam Alí (P), cuando un hombre pobre entró en la Mezquita del Profeta (PBD) y pidió ayuda, y en este instante el Imam Alí (P) que estaba rezando y realizando la inclinación, señaló a aquel pobre con el dedo pequeño de su mano derecha y él tomó el anillo que estaba en la mano del Imam (P). [10]
En esta aleya, se limita la denominación de Wali (protector) para ciertas personas; es decir Allah, el Profeta (PBD) y el Imam Alí (P).
Referencias
- ↑ Raqib Isfahani, pág. 885
- ↑ Amini, tomo 1, pág. 641
- ↑ Tabataba’í, al-Mizan, tomo 6, pág. 12
- ↑ Tabataba’í, al-Mizan, tomo 18, pág. 231
- ↑ Mutahari, págs. 56-57
- ↑ Tabataba’í, al-Mizan, tomo 6, pág. 13
- ↑ Sura al-Shoura, aleyas 8 y 9
- ↑ Tabataba’í, al-Mizan, tomo 6, pág. 13
- ↑ Kulayni, tomo 1, pág. 268
- ↑ Ihqaq al-Haq, tomo 2, pág. 399; Mayma’ al-Bayan, tomo 3, págs. 324-325
Bibliografía
- Sagrado Corán
- Amini, Abdul Husain, al-Gadir, Qom, 1416 hégira lunar.
- Kulayni, Muhammad Ibn Ya’qub, al-Kafi, Teheran, 1365 hégira solar.
- Raqib Isfahani, Husain, Mufradat fi Garib al-Qur’an, Beirut, 1412 hégira lunar.
- Tabataba’í, Muhammad Husain, al-Mizan fi Tafsir al-Qur’an, Qom, 1417 hégira lunar.
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Las traducciones de las aleyas del Corán usadas en este artículo son propias del traductor y no tienen la misma exactitud del texto original del Sagrado Corán. |